lunes, 6 de febrero de 2012

Gavilana

Todavía siento en mi cabeza el roce del aire y el zumbido de
aquel proyectil que me pasó justo por encima un caluroso día
del pasado verano al atardecer, cuando me encontraba al
borde del río Guadahortuna acechando las ratas de agua.
Me quedé "colocao", fue tan salvaje, tan maravilloso, ver tan
fugazmente a este predador de ojos y garras que hielan la
sangre, volando a esa velocidad y baja altura sobre el río a
sabiendas de que era la hora de abrevar de los pajarillos que
venían a cientos, Cogujadas, Terreras, Gorriones, etc.

Bellísima escena que no olvidaré jamás.

Pues por la proximidad y conocida de todos la territorialidad
de estas aves, siempre solitarias, sin pareja, por el tamaño de
la bala que casi me rozó, estoy por afirmar que bien tiene que
ser la misma que ahora ha sido cogida in fraganti en la nave de
un cortijo familiar (prima mía Ana del Valle Torres ) queriendo
capturar a los gorriones que se refugian y duermen por cerchas
y entramados bajo cubierto.

Su tamaño grande, barreado horizontal sin tono rojizo en pecho
de los machos, magnífica esbeltez y larga cola...hembra adulta.

¡ Pues no sabéis lo que me he alegrado de ver la cara de cerca
de aquella centella veraniega! Encantado de conocerla, señorita.

6 comentarios:

  1. Un ave preciosa. Saludos desde mi terruño

    ResponderEliminar
  2. Qué gozada de bicho. Enhorabuena!! Por cierto, las lechuzas de la entrada anterior son la caña!!
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. Son unos bichos preciosos, enhorabuena por la observación y por el fisfrute. A mi me pasó algo parecido la semana pasada cuando estaba muestreando en el río, me pasó un gavilán, un macho, a un metro de la cabeza, una pasada.
    un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Que maravilla de ejemplar!!
    Una suerte poder tenerla tan cerquita....y quieta.
    Salud.

    ResponderEliminar
  5. Muy buena!! creo que es la primera vez que veo uno salvaje en una infraestructura como esa, la nave agricola!
    Saludos camperos.

    ResponderEliminar
  6. Leyéndote he podido sentir ese zumbido. Que maravilla de ave y que suerte poderla tener así de cerca.
    Un saludo!!

    ResponderEliminar