pensar que veía más hembras que machos de esta
avecilla invernante en mi entorno.
Llegué incluso a creer que probablemente los
machos cruzarían más a Africa que las hembras.
Es cierto que el macho es muy, muy esquivo y
casi imposible de fotografiar, pues se esconde en
cuanto te detecta.
Con esta foto y el dictamen de Juan Pérez gran
pajarero reconocido, creo entender porqué veía
tantas hembras...
Veis como el juvenil es casi idéntico a la hembra lo
que triplica su simple observación (hembras, más
juveniles de hembra, más juveniles de macho).
Este juvenil de macho de la foto luce esa ceja que
ya marca la próxima mancha de negro en cuello,
que triplica su simple observación (hembras, más
juveniles de hembra, más juveniles de macho).
Este juvenil de macho de la foto luce esa ceja que
ya marca la próxima mancha de negro en cuello,
dorso y pechuga.
La hembra sin señal de negro. Inapreciable a
simple vista. ¡ Para eso estamos los paparazzis !
-Yo también sospechaba que no podía haber tantas hembras...pero con eso de la ceja...a partir de ahora voy a fijarme...
ResponderEliminarSaludos
Yo tampoco lo sabía. Gracias Jesús por la aclaración, a partir de ahora me fijaré en la ceja y en las manchas negras antes de decir que es una hembra.
ResponderEliminarSaludos!!
Instructiva entrada, si señor.
ResponderEliminarVoy a revisar el archivo que tengo muchas hembras...de colirrojo me refiero.
ResponderEliminarComo bien dices esa "ceja" es decisiva.Muy bien explicado y preciosas fotos.
ResponderEliminarSaludos Jesús.
Buen apunte (que conocia de hace poco) y adecuadas fotos.
ResponderEliminarSaludos camperos!