Estudiando Corzos

He dejado casi una semana mi cálido Sur para pasar unos días por Toledo, campo infinito, verdor, naturaleza para dar y regalar y frío, mucho frío, incluso algo de nieve, pero así es como nos gusta ¿verdad?

Se acerca la Primavera y el cuerpo ya me tira  para ir a buscar mamíferos, tras disfrutar de tantas aves invernantes, ahora que los deportistas-cazadores nos dan una tregua ...¡al campo, que no hay peligro!

Pues ya he conseguido algunas cosillas que os iré mostrando, queridos amigos de nuestra increíble fauna.
Esta noche os reproduzco esta preciosa serie de fotos hechas con una de mis cámaras de fototrampeo, en las que vemos actitudes interesantes:

Los Corzos son gregarios en invierno, forman grupos de machos o de hembras, aunque pronto con la llegada del celo se romperán estos grupos.
Son tanto diurnos (fijaros la hora, a las 13 h, medio día) como nocturnos. La razón es que necesitan comer un poco muchas veces, pues su estómago es pequeño para poder correr a gran velocidad sin cargar con una tripa demasiado llena. Por eso, si no se les hostiga pastan también a esas horas, en invierno, claro.
Las cornamentas de los cuatro machitos que van juntos, están ya hechas, las astas de unos 10 cms (que se les caerán el próximo otoño) aunque no estén aún ramificadas, por lo que pienso sean animales ya de 2º año:

No sé si tendrá importancia, pero parece que el que veis aquí cerrando grupo es el que presenta las astas más grandes ¿jerarquía?
Grisáceos ahora (rojizos luego en verano), con olfato ( ¿habrán detectado algún roce de mi cuerpo en la encinilla, al acercarme a poner las máquinas? ) y oído increíbles.

Las hembras , que fueron cubiertas en el celo del pasado verano, ya andan grávidas y se van tornando muy solitarias y recelosas  pues el parto está próximo y hay que ir buscando ya tranquilidad y aislamiento para parir a su corzino ( a veces dos):

El solitario macho de estas dos últimas fotos, aún presenta el terciopelo que le cubre la cuerna,  que por abril comenzará a caérsele, lo que nos dice que es un animal muy joven, de 1er año:

Cuanta belleza, diurna y nocturna, tranquilidad, misterio arropado por el frescor del bosque. No me cansaré jamás de esperarlos, de ver sus afiladas huellas, sus amontonados excrementos del tamaño de los de un Conejo pero con una puntita afilada los de las hembras y algo más redondos los de los machos, de oir sus ladridos de aviso cuando me detectan, etc.  "Fantasmas que decoran el bosque", así los quiero, tranquilos, ocultos, benditos sean por su belleza y fragilidad.