Ni rastro del Colimbo chico

He pasado algunas mañanas intentando ver de nuevo al Colimbo chico que tuve la enorme suerte de avistar
hace unos días. Ni señales de el, nada de nada.

Al posicionarme temprano en el saliente rocoso, molesté a este juvenil de PATIAMARILLA que estaba allí descansando al amanecer tras toda una noche de pesquera :

Además de deleitarme con el precioso vuelo de los finos CHARRANES PATINEGROS que mostraba
en anterior post, entretetuve mi tiempo estas mañanas con los omnipresentes CORMORANES que vuelan
en todas direcciones y van a posarse en el agua cuando no detectan peligro para después sumergirse cada  medio minuto:

Este, se llevó el susto de su vida, al venirse a bucear cerca al abrigo de las rocas donde yo estaba sentado y encontrarse de repente conmigo al salir del agua, el pobre vaya sorpresa que se llevó:

Pero, sin lugar a dudas, el espectáculo invernal en esta costa granadina lo organizan los ALCATRACES:

Son enormes, bellos, peculiares, auténticas aeronaves.

Temprano, me sobrevoló ( a contraluz ) este juvenil  1er año de plumaje tan oscuro y moteado, maravilloso:

Luego, aparecieron los adultos:

Conforme mejoraba la luz, se podía intentar hacerles alguna foto buena.
Muy difícil, en vuelo, con el sol enfrente, casi siempre bastante lejos...

Imposible captar de cerca sus picadas, no dan tiempo, así que decidí traerme alguna lejana fácil de coger:

No todo son aves si te acercas al borde del mar. La distracción está asegurada vía buceadores, pescadores
o incluso alguna escena como esta en la que vemos al guardia civil celoso de su deber que supervisa a estas
pobres gentes que salen a remo, pidiéndoles su licencia de pesca y echandoles un ojo al tamaño de sus capturas:

Justo y necesario, por el bien de la fauna marina.

Haaalaaa..... ¡ toma 500 caballos de motores ! y el pobre pescador todavía acongojao.